Claudia Sheinbaum Condena La Violencia Durante la Marcha del 2 de Octubre
La presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, expresó su rechazo a los actos violentos ocurridos durante la marcha del 2 de octubre, que se llevó a cabo para conmemorar la trágica masacre de Tlatelolco de 1968. La mandataria califica estos eventos como parte de una estrategia para crear una falsa narrativa de represión por parte de su administración.
Hechos Violentos y la Respuesta de Sheinbaum
Durante su conferencia de prensa matutina, Sheinbaum se refirió a los incidentes violentos en la marcha, señalando la presencia de grupos encapuchados que, según ella, buscaban provocar a la policía. "¿De qué sirve esta violencia? ¿A quién le sirve?", cuestionó, destacando la inutilidad de los actos violentos, que incluyeron el uso de bombas molotov.
Lesiones y Consecuencias
Los enfrentamientos entre estos grupos y la policía resultaron en 16 agentes hospitalizados, de los cuales tres se encuentran en estado grave. Esta marcha ha sido considerada una de las más violentas en los últimos años, lo que ha generado preocupación entre los ciudadanos y las autoridades.
La Narrativa de Represión
Sheinbaum argumentó que los altercados tienen el objetivo de igualar su administración con el régimen del 68, al intentar construir una imagen de un gobierno represor. “Quieren hacer parecer que el gobierno de la cuarta transformación es igual al de 1968, que reprime”, apuntó.
Apoyo a las Fuerzas Policiales
La presidenta también mostró su apoyo a los policías heridos, elogiando su resistencia a no caer en provocaciones. “Es increíble cómo contuvieron sin caer en ninguna provocación”, afirmó.
Además, enfatizó que las agresiones contra uniformados y periodistas deben ser investigadas penalmente. “Es un delito muchas de las cosas que hicieron. La Fiscalía de la Ciudad de México tendrá que identificar a quienes hayan agredido a personas, especialmente a policías”, subrayó.
Un Llamado a La Paz en las Manifestaciones
Sheinbaum insistió en que su administración no tolerará la violencia en manifestaciones. “Puedo estar de acuerdo con el derecho a protestar, pero esta agresión a las personas y a los periodistas tiene que revisarse”, afirmó. También hizo un llamado a que las manifestaciones sean pacíficas, enfatizando la importancia de la libertad de expresión en un estado democrático.
Investigación de Grupos Violentos
La presidenta propuso abrir una investigación formal sobre el financiamiento de los grupos violentos que participaron en la marcha. "Es esencial identificar el origen de estos actos y quién los respalda para prevenir futuros incidentes", concluyó.
Reflexión Final
Los acontecimientos del 2 de octubre resuenan profundamente en la memoria colectiva de México. Mientras se recuerdan las lecciones del pasado, es crucial que las manifestaciones futuras se realicen de manera pacífica y respetuosa. El compromiso de la administración de Sheinbaum con la seguridad y el respeto al derecho de manifestación será vital para afrontar estos desafíos.
Para más información sobre políticas de seguridad y derechos humanos en México, consulta este artículo de Human Rights Watch.