EMBAJADA DE ESTADOS UNIDOS
DECLARACIÓN DEL EMBAJADOR RONALD JOHNSON
ESTAMOS UNIDOS COMO DOS ALIADOS SOBERANOS
Los Estados Unidos y México comparten un desafío crucial: los cárteles criminales que amenazan la seguridad y el bienestar de nuestras comunidades. Estos grupos no solo son narcotraficantes; son organizaciones terroristas que destruyen vidas y corrompen instituciones, creando un estado de miedo en comunidades enteras.
El presidente Trump ha sido claro en su postura, y hay un consenso en el gobierno estadounidense sobre la necesidad de enfrentar a estos enemigos. La colaboración con el gobierno de la presidenta Sheinbaum se intensificará para abordar esta amenaza con una seriedad renovada. Como lo ha destacado el secretario Rubio, es fundamental abordar a los cárteles como organizaciones armadas, no simplemente como actores en el narcotráfico.
Esto representa un cambio de paradigma en la lucha contra el crimen organizado; debemos tratar a estos cárteles como lo que realmente son: una amenaza a la soberanía y seguridad de ambas naciones. Juntos, Estados Unidos y México establecen un frente sólido contra esta adversidad, comprometidos en proteger a nuestros ciudadanos y desmantelar las redes que perpetúan el caos.
Nuestra estrategia se basa en el principio de la colaboración. No se trata de que Estados Unidos actúe solo, sino de construir un esfuerzo conjunto con México para hacer frente a estos enemigos comunes. Esto incluye la lucha contra el tráfico de drogas y la inmigración ilegal, además de la implementación de medidas efectivas para garantizar que solo aquellos que perpetúan el miedo y la violencia sean los que temen por su futuro.
Es esencial que nuestras dos naciones trabajen de manera sinérgica, utilizando todas las herramientas disponibles para salvaguardar a nuestras comunidades. Nuestro mensaje es contundente: estamos unidos. El compromiso compartido con la justicia y la seguridad es lo que nos define y nos fortalece como aliados soberanos.
En resumen, la cooperación en la frontera será prioritaria, asegurando que tomemos acciones decisivas en todas las áreas de seguridad. La lucha contra los cárteles y la protección de nuestros pueblos será una responsabilidad compartida, respaldada por el poder de la determinación y la resolución entre México y Estados Unidos.
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