Del 26 de septiembre al 5 de octubre de 2025, el Bosque de Chapultepec se convertirá en un vibrante escenario para el diseño en todas sus formas. El Abierto Mexicano de Diseño, que se inició en 2013 y ha evolucionado como un referente en Latinoamérica, estrenará una nueva sede y un concepto curatorial bajo el lema “MALEZA. Diseño en resistencia”.
Joana Ruiz-Galindo, codirectora y cofundadora del festival, explica que el objetivo es que el público se conecte con el diseño de manera más profunda, entendiendo que no se trata solo de estética, sino de una disciplina presente en nuestra vida cotidiana. “Queremos que el diseño sea percibido como algo propio”, destaca.

Esta edición cuenta con la curaduría de dos colectivos destacados: Diseña Colectiva, conformado por Taina Campos y Andrea Soler, y Las Flaminguettes, que incluye a Mara Soler y Daniela Villanueva. Juntos, han interpretado el concepto de Maleza para celebrar proyectos que emergen desde los márgenes y que son resilientes y transformadores. “El Abierto ha estado en pausa desde 2020 debido a la pandemia y ahora resurge como la maleza, saliendo de entre las grietas”, reflexiona Ruiz-Galindo.
El cambio de sede a Chapultepec responde a la renovación del bosque y al crecimiento del festival. “Ahora podemos dialogar sobre sustentabilidad y el rol de los diseñadores en este ámbito. El bosque es un espacio público, democrático y cultural que se alinea con nuestra misión”, afirma Ruiz-Galindo.

En esta oportunidad, el festival se llevará a cabo en seis sedes diferentes: Centro de Cultura Digital, Lago Algo, Papalote Museo del Niño, Cineteca Nacional Chapultepec, Museo Tamayo y Casa del Lago, donde se organizarán cinco pabellones temáticos: Académico, Arquitectura, Espacio Público, Mobiliario y Objeto, y Novedades. Además, la exhibición central se distribuirá en cuatro parcelas dentro del bosque.
Ruiz-Galindo enfatiza que la convocatoria abierta para participar es uno de los mayores aprendizajes del Abierto: “Queremos ver de todo, desde bitácoras y procesos hasta prototipos y errores. El diseño es inclusivo, es para todos”, acentúa.

Al reflexionar sobre el impacto del diseño, Ruiz-Galindo remarca que “el 80% del impacto ambiental de un producto se decide durante la fase de diseño. Hay una gran responsabilidad en este aspecto. Un diseño más inclusivo puede transformar nuestra forma de vivir”. Además, el festival cuenta con el respaldo de la Secretaría de Turismo de la Ciudad de México, que ha respetado la independencia de la curaduría, reforzando la idea de que CDMX necesita un evento de diseño que todos puedan sentir como propio.
Mirando hacia el futuro, Ruiz-Galindo desea que Maleza genere nuevas formas de comunidad creativa: “Quiero que el gremio de diseño y arquitectura se sienta en casa, un espacio donde debatir y exhibir lo que no se aborda en otras plataformas”.
La invitación es clara: “Vengan con la mente abierta y dispuestos a reflexionar. Se abordarán temas como migración, niñez, maternidad y cuidados. Tendrán la oportunidad de explorar Chapultepec, utilizar el cablebús y descubrir pabellones y parcelas. Serán diez días para disfrutar, pensar y celebrar el diseño”.
La convocatoria para participar en esta edición está abierta hasta el 10 de agosto en abiertocdmx.com. Las redes sociales oficiales son @abiertocdmx en Instagram y abierto-cdmx en X.