La situación de desnutrición en Gaza ha alcanzado niveles alarmantes, reflejando la dura realidad que enfrentan muchos niños en la región. Muhammad Zakariya Ayyoub al-Matouq, un bebé de un año y medio, es uno de los casos más conmovedores. Su frágil cuerpo muestra signos evidentes de desnutrición aguda.
El pequeño fue captado en una fotografía junto a su madre, Hedaya al-Muta, el 21 de julio en un campamento en la Franja de Gaza, donde los habitantes enfrentan escasez de alimentos y recursos básicos. Durante una entrevista, Hedaya comparte su dolorosa experiencia: “Ahora pesa 6 kilos, cuando antes pesaba 9. La falta de alimentos ha afectado severamente su desarrollo.”
La dramática situación se ha intensificado debido al bloqueo israelí, que ha limitado la entrada de suministros esenciales. Hedaya, viuda y sin medios de sustento, expresa su desesperación: “No puedo alimentarlo adecuadamente. Estoy agotada y sola en esto.”
El fotógrafo Ahmed al-Arini, quien capturó la desgarradora imagen, habla del impacto emocional que tuvo tomar esa foto. “Me costaba respirar entre cada toma”, dice, recordando la tristeza que sintió al presenciar el sufrimiento de Muhammad y su madre.
Intervención Humanitaria
La Organización de Naciones Unidas (ONU) ha alertado sobre la situación crítica en Gaza, indicando que hay 6,000 camiones de ayuda humanitaria listos para entrar al territorio. Sin embargo, las autoridades israelíes argumentan que han permitido la entrada de suficiente ayuda, culpan a Hamas y piden responsabilidades sobre el incremento de la desnutrición.
Desnutrición infantil y sufrimiento humano
Médicos Sin Fronteras (MSF) ha declarado que están viendo “niveles catastróficos de desnutrición” en la región. Este llamado a la acción se ve reforzado por el hecho de que, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, 122 palestinos, incluidos al menos 83 niños, han fallecido a causa de esta crisis alimentaria.
Retrato de la Desesperación
Ahmed al-Arini destaca que muchos jóvenes y adultos están experimentando una hambruna extrema. “Los precios de los alimentos se han disparado y la gente está luchando por conseguir lo básico. He visto a muchos compañeros de trabajo colapsar por la desnutrición”, relata Ahmed, quien también sufre en carne propia la escasez.
Reflexiones Finales
A medida que la situación en Gaza se deteriora, hay un llamado urgente para mejorar la ayuda humanitaria y asegurar que los esfuerzos lleguen a quienes más lo necesitan. La tragedia de Muhammad y su madre es un recordatorio del costo humano de los conflictos y la importancia de actuar rápidamente para aliviar su sufrimiento.
